Capítulo 23

 

 Rafi y Miles están llegando a la casa.

--¡¡no te pienso perdonar esto¡ --le dice Rafi.

--¡¡el que no te voy a perdonar que te comportes como una esposa celosa soy yo¡ ¡¡tú sólo eres una arrastrada y no tienes ningún derecho conmigo¡¡

Rafi está muy herida por el desprecio constante de Miles:

--¡¡yo te voy a dar tu primer varón y sino te casas conmigo no lo verás nunca¡¡

--tú ten un hijo macho como yo y si es mio me caso contigo pero primero quiero a mi pequeño Miles en brazos y los resultados de la prueba.

Rafi siente mucha esperanza:

--que conste que lo has dicho.

Miles se dirige a las habitaciones antes de desaparecer por el pasillo dice:

--dormiré en el cuarto de tu hijo.

--¡¡puedes dormir conmigo¡

él la mira fríamente:

--dormiré en el cuarto de tu hijo y cerraré con llave, no me molestes... jamás.

Rafi se queda sola. Se acaricia el vientre esperanzada.

--tienes que ser varón,  después de tantas niñas tiene que nacer varón.

Y tiene esa ilusión muy dentro de ella:

--vas a ser niño,  tienes que ser niño.

Bea llega en ese momento con su hija. Rafi está furiosa.

--¡deja a tu hija¡¡¡tú y yo tenemos que hablar¡¡ ¡Miles es mi macho y debes saberlo¡

Bea se quiere encerrar en su habitación con su hija Alejandra pero Rafi la arrastra hacia el comedor.

-¡tenemos que hablar¡

Rafi ahonda en el dolor de su hija:

--¡ha estado jugando con las dos pero me tendrá que cumplir a mí¡

Miles, que estaba en el cuarto, sale para defenderse:

--eso es cierto yo estaba borracho y hasta que salga la prueba de sangre no estamos seguros de nada.

Rafi se da cuenta del dolor y la decepción de su hija y se siente la vencedora.

--¡¡eres un cerdo¡¡ --Bea a Miles.

--bueno no te pongas asi¡¡nos podemos divertir igual¡ --Miles.

--hija, has perdido,  aceptalo.

--¡Callate Rafi, Bea. Tú eres la que me gustas. Tu madre se aprovechó de mí¡¡ --dice Miles a Bea causando el enojo de las dos mujeres.

--¡yo espero un hijo tuyo y me tienes que cumplir¡

Miles haría lo que fuera por librarse del compromiso con Rafi.

--¡sabes que soy el padre de la hija de Bea y también le tengo que cumplir¡ ¡mañana inicio los trámites para reconocer a mi hija¡

Rafi se muere de rabia. Bea está furiosa pero le ilusiona que Miles se haga cargo de su hija y una vez más no desmiente que sea el padre.

--¡me has prometido boda si es varón¡

--y lo cumpliré. Si me das un varón me caso contigo. Bea puede ser mi amante.

Bea lo mira con desprecio:

--¡¡te odio a ti y me odio a mi misma por caer en tus brazos¡

--bien que te gustaba revolcarte conmigo --Miles hiriente.

--¡¡no me lo recuerdes¡¡

A Bea le duele que pese a todo ama a ese hombre y está celosa que su madre le vaya a dar un hijo. También le duele la mirada de su madre que la mira como si fuera su enemiga.

--que pena me das mamá, lamento que hayas cambiado a papá por un hombre que no te respeta.

A pesar de las palabras de su hija y del desprecio de Miles, Rafi abraza al guapo primo de su esposo feliz:

--Miles se va a casar conmigo.

--¡no os quiero ver a ninguno de los dos¡

Bea se refugia en su hija llorando. Está dolida pero en el fondo desea que Miles cumpla su palabra y le dé su apellido a Alejandra.

A Rafi no le importa nada. Ahora lo único que le importa es Miles y el hijo que le va a dar. Lo abraza a él:

--yo te haré muy feliz muy amor.

Miles se aparta de ella:

--¡¡jamás¡¡ ¡sí, tener a un hombre como yo te hará muy feliz a mí pero yo jamás estaré a tu lado¡¡

Rafi toma la mano de Miles y se la pone en el vientre:

--aquí crece tu hijo macho. Tu hijo. Tu único hijo macho.

Miles aparta su mano del vientre de la mujer. La mira con rencor:

--eso quiero verlo,  hasta entonces y pese a que viva contigo... no te me vuelvas a acercar.

y Miles se encierra en el cuarto. Pese a sus palabras Rafi está feliz. Le basta con que todos piensen que son una pareja y que por eso viven juntos:

-- me amará ¡¡claro que me amará¡¡

La mujer se acaricia el vientre y piensa obsesivamente en Miles y en que lleva a su hijo dentro de ella

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A primera hora de la mañana Mike se levanta. Entra en el cuarto. De los chicos. En calzoncillos. Ellos no están y la cama sin hacer. Supone que María se fue con ellos. Se ducha tranquilamente sin cerrar la puerta con cerrojo y con las cortinas abiertas. María se levanta medio dormida. No ha oido la ducha ya que Mike en ese momento la ha apagado. Abre la puerta y se encuentra a Mike totalmente desnudo y mojado.

María tiene frente así un cuerpo de hombre desnudo, maduro y muy atractivo. Todas sus partes relucientes por el agua. Es la primera vez que ve a un hombre desnudo con tanta luz y sobría. Grita del susto y del deseo. Sus ojos se le clavan en los genitales a él. Le da vergüenza pero le gusta lo que ve. Mike enseguida se cubre con la cortina. María se va corriendo. Se encierra en su dormitorio sofocada. Pero luego sonríe. Le ha gustado lo que ha visto. Mike se seca con una sonrisa pícaro. Le ha gustado la intensidad de la mirada de María y también la inocencia de esta. Igualmente los dos están muy avergonzados para encontrarse y no salen del dormitorio. El uno decide no salir hasta que no estén solos. María está muy excitada y aunque se hace sentir sucia hace algo que jamás hizo y es masturbarse pensando en el cuerpo desnudo del guapo padre de su novio. Siente culpa pero es más el deseo. Después de los tocamientos ya está más tranquila aunque cuando llega Luke no se atreve a mirar a los ojos a su novio. Cuando se encuentra con Mike éste muestra una sonrisa pícara que a ella le ruboriza. Mike siente culpa por su hijo a quien no mira a los ojos. Luke confía ciegamente en ambos y no se da cuenta de nada.