En la tarde, Emilio va hacia los lavabos del parque. Pasara un rato antes de ir a la biblioteca.
--hoy será un gran día. Lo presiento.
El chico está muy excitado por la gran tarde del día anterior.
--ojalá se repita. Seguro que es una señal.
Emilio está ilusionado y cachondo.
--Pronto perderé la virginidad. Con suerte hoy mismo.
Emilio está muy excitado. Se pone a mil cuando acercándose al lavabo ve a alguien entrar.
--¡¡ese culo yo lo conozco¡
Es Miles. Emilio no puede creer su suerte cuando ve a Miles ir al lavabo. Sonríe:
--¡¡lo sabía¡¡ ¡¡no se me va a escapar¡¡ ¡estoy en racha¡ ¡ hoy va a ser mi día de suerte¡
Lo sigue con prisa pero para su decepción Miles no hace pis en el urinario sino encerrado en el wáter pero oye el fuerte chorro y eso lo excita. Acaricia la puerta excitado con la mano dentro del pantalón desabrochado. Se va masturbando. Miles abre de repente y lo encuentra muy cerca y con los pantalones desabrochados.
--¡lo sabía asqueroso¡¡
--¡¡yo no he hecho nada¡¡ --dice Emilio con miedo.
--¡¡¡porque no te he dejado¡¡ --le grita mientras le pega una patada en la barriga.
Emilio mira a Miles con miedo. Con mucho odio, el norteamericano le dice:
--¿¡¡me la querías ver eh maricon?¡ ¡¡pues te vas a morir con las ganas yo soy demasiado hombre para ti¡¡ ¡¡a mi no me gustan los degenerados como tú, a ver si así aprendes a mantenerte lejos de los verdaderos machos¡¡
--¡¡no me hagas daño¡¡ --dice Emilio con miedo.
--¡¡eres una maricona repugnante, debería matarte¡ --Emilio está aterrado-- pero no voy a mancharme la manos de sangre contigo¡¡
Miles le da patada en barriga:
--¡¡y la próxima vez será peor, no te metas conmigo. Los tipos como tu me dan asco¡¡
Emilio está tirado en el piso, trata de levantarse pero Miles lo agarra del pelo:
--¡¡a ti nadie te ha dado permiso para moverte, maricón¡¡
--déjame --le suplica Emilio dolido.
Miles lo golpea. Le da patadas.
--¡¡nunca más volverás a molestar a los machos, basura¡
Miles lo arrastra hasta el interior del wáter.
--¡¡¿¿no querías estar a solas conmigo?¡ ¡¡pues disfruta¡¡
Y con mucho odio Miles mete la cabeza del asustado Emilio dentro del wáter y la cubre con la tapa. Aprieta fuerte.
--¡¡¿no te gusta tanto vernos mear?¡ ¡¡pues disfruta... disfruta¡¡
Y tira de la cadena con la cabeza de Emilio dentro del wáter. Luego lo suelta... Emilio se estaba ahogando. Tose. Miles lo deja.
--¡¡estás todo mojado y hueles horribles¡¡¡desnúdate¡
Emilio llora. Suplica.
--déjame en paz, por favor. No te he hecho nada.
--¿no me querías ver la verga? si te desnudas te la enseño.
Miles se desabrocha los pantalones y a al urinario. A Emilio le excita mucho ver cómo se desabrocha los pantalones. Como se acerca al urinario. Como se la saca.
--hablo en serio ¿qué serías capaz de hacer por verme la verga?
Emilio está asustado pero ese hombre le pone muy cachondo.
--todo.
--pues yo también te la quiero ver… tienes tiempo hasta que acabe de mear. Si te quedaste en bolas ganas y antes de que me la guarde dejo que me la mires.
Emilio tiene miedo pero desea demasiado esa verga y le excita la idea de quedarse desnudo ante ese guapo. Con rapidez se queda en bolas. Tiene una fuerte erección y Miles se le ríe.
--¡¿¡eso es todo lo que te crece?¡¡pareces una niña?¡no tienes nada. Hasta un niño de cinco años la tiene más grande que tú¡
Emilio no dice nada. Miles se la guarda y se lanza contra él. De nuevo le da una brutal paliza. Estrella su cabeza contra la pared. Lo insulta. Lo deja casi inconsciente y no tiene fuerzas para pedir que no le haga daño.
--¡¡te lo has buscado¡¡ ¡podías haber aprovechado para irte pero eres demasiado generado¡
Lo deja desnudo y en el suelo. Le escupe en la cara.
--la próxima vez que me veas, huye de mi, maricón. Hazme caso... es por tu bien.
Miles agarra la ropa del chico y se va con ella se va dejando a Emilio tirado en el piso llorando. Se siente morir. Emilio no tiene fuerzas para moverse. Pide ayuda débilmente. Mientras se retuerce del dolor no puede evitar maldecir su mala suerte.
--¿¿porqué todos los hombres guapos me tienen que despreciar? ¡¡yo sé que sería demasiado para mí que un hombre me amara, un hombre de verdad, que ni siquiera un beso de un hombre guapo puedo tener¡¡ ¡¡la felicidad no es para mí¡¡ ¡¡supongo que alguien allá arriba me quiere castigar por no sé que cosa y yo me resigno a mirar de lejos a los hombres que me gustan ¿porqué estos me tienen que tratan tan feo?
En ese momento entran tres hombres que rondan los setenta. Emilio le suplica ayuda. Los hombres se excitan mucho al ver a ese chico tan joven desnudo. Los viejos se miran con complicidad. Una vigila mientras dos se acercan a Emilio.
--te vamos a ayudar. Tranquilo.
Y mientras uno vigila, el otro lo agarra a Emilio y el tercero se clava en Emilio con violencia. Emilio grita y llora con horror. Siente como si un puñal ardiendo lo atravesara. Lo están matando. El que lo sujeta lo ha puesto la mano en la boca para que no grite con tanta fuerza que casi lo ahoga. Lágrimas de metal deslizan por el rostro del muchacho mientras lo matan. Y no una vez sino tres ya que los viejos se van turnando y los tres lo violan. Son tres puñales ardiendo los que atraviesan su cuerpo. Los viejos se van corriendo dejando a Emilio desnudo y conmocionado. Esta muerto por dentro. Lo han matado.
1 año después…
Emilio lleva desde ese trágico día encerrado en un psiquiátrico. Nadie sabe cómo ayudarlo. No habla. Parece un vegetal. No quiere comer. No se mueve. No reacciona. No vive. Ni se inmuta cuando su madre le comunica que su padre ha muerto. La mujer está deshecha. Se ha quedado sola. Y no sabe qué hacer para ayudar a su hijo. Emilio sólo responde a un estímulo: Dylan. Ver "Sensación de vivir" es su oasis. Su medicina. Su refugio. Con tal de ver a Dylan Emilio va comiendo un poco y hace caso de los médicos.
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